Una representación teatral de los jóvenes de JuCUM - "las mujeres en el sepulcro" ilustra este tema. La sorpresa, la alegría por el descubrimiento, el impulso de compartirlo y el escepticismo de los apóstoles se representan con energía.
La jornada se abrió con una meditación de Markus Buser, uno de los directores del Centro Juventud Con Una Misión, sobre el hecho de que la resurrección de Cristo demuestra que Dios es un Dios de relaciones. La calidad de nuestras relaciones mutuas lo refleja y da a conocer a Cristo vivo.
De izquierda a derecha, Olivier Fleury (JC2033), Héctor Pardo (Iglesia Cristiana Carismática Tabernáculo de Fe, Bogotá) y Markus Buser (Juventud Con Una Misión)
Ayer, Día Mundial de la Mujer, F. Munera concluyó su conferencia con algunas reflexiones sobre la vocación y la misión de las mujeres como testigos de la resurrección: "Queridas mujeres aquí presentes, ustedes son las testigos de la resurrección de Cristo. Proclamen con valentía esta verdad que da sentido a la vida, a toda la vida. Ayúdennos a superar nuestros miedos y permítannos, con ustedes, abrazar verdaderamente la esperanza en la alegría de la misión".
María Cristina Ventura, profesora de la Universidad Teológica de Centroamérica en Costa Rica, prosigue la reflexión sobre este tema. Señala que las mujeres de la resurrección son las mismas que las de la crucifixión.
Están presentes en todos los momentos de la vida de Jesús desde Galilea y son su familia y sus discípulas.
María Magdalena es la primera que se abre al misterio de la resurrección y lo anuncia. Es, pues, "la apóstol de los apóstoles" y pertenece a la apostolicidad. Contemplar a estas mujeres nos permite ver otro tipo de Iglesia. Representan un elemento femenino de revelación.
Haciéndose eco del ejemplo de las mujeres junto al sepulcro, Gabriel Peralta, pastor de la Iglesia Evangélica "El Punto de Encuentro" de Bogotá, señala que el método de Jesús va del nivel micro al macro, por así decirlo. "Veo, dice, gente muy preocupada por cambiar el mundo, pero sólo cuando el poder de la resurrección llega y transforma su interior se produce el impacto transformador que cambia sociedades enteras".
Los creyentes son llevados por el amor a vivir en comunión con el Espíritu para hacer brillar la luz que han recibido. Espera que la próxima década sea "una década de vivir en el poder de resurrección de Jesús" y que en 2033 podamos "celebrar juntos las maravillas que el Espíritu Santo realizará a través de su pueblo para gloria de Jesús".
Pastor Gabriel Peralta, Iglesia Evangélica "El Punto de Encuentro", Bogotá
El camino de Emaús
Invitar a cristianos de distintas iglesias a recorrer cada año el camino de Emaús para ponerse en camino como las mujeres junto al sepulcro y prepararse para el Jubileo de la resurrección de Jesucristo en 2033 es una de las propuestas de la iniciativa JC2033, explica el pastor suizo Martin Hoegger.
El camino de Emaús es ante todo un camino geográfico, aunque es difícil decir dónde se encuentra la antigua aldea de Emaús. Pero es también y sobre todo un camino espiritual. En efecto, desde su resurrección, todos nuestros caminos pueden convertirse en caminos de Emaús, donde el Resucitado quiere llegar hasta nosotros. Hoegger explica que el camino hacia 2033 es una especie de camino de Emaús por el que queremos dejarnos guiar por el Resucitado.
Peregrinación organizada por JC2033 en el camino a Emaús en 2020
Por la tarde, se forman pequeños grupos en los que se invita a cada persona, en siete minutos, a compartir su "Emaús existencial", es decir, cómo ha caminado con Cristo. Este método, inspirado en el Foro Cristiano Mundial, permite conocerse mejor. Los grupos son interconfesionales e intergeneracionales. ¡Y el fruto de este ejercicio es una gran alegría! (Sobre este "método Foro", ver: https://globalchristianforum.org/sharing-faith-stories-in-groups/ )
Compartiendo nuestro "camino de Emaús existencial"
Como los discípulos en el camino de Emaús,
creemos que nos acompañas durante estos días.
Hemos hablado, orado y buscado tu voluntad,
pero también necesitamos que vengas a nosotros
para explicarnos todas las cosas, convencernos
y unir nuestros pensamientos por el poder de tu Espíritu.
Al volver, oramos con Cleofás y el otro discípulo
en quien cada uno puede reconocerse.
¡Quédate con nosotros, Señor!
¡Guárdanos en nuestros caminos!
¡Guárdanos en la unidad del Espíritu!
¡Guarda nuestros corazones por encima de todo!
Haz que broten de ellos manantiales de vida
¡y que se extienda el fuego de tu amor!
Martin Hoegger